Los agravios tóxicos pueden causar lesiones generalizadas y muchas víctimas inocentes pueden sufrir enfermedades y muertes por negligencia. Los casos de agravio tóxico a menudo se producen cuando empresas negligentes permiten que sustancias nocivas lleguen a los consumidores o incluso a sus propios empleados. En una demanda por agravio tóxico, la víctima alega que la exposición a alguna sustancia peligrosa causó una lesión o enfermedad. Si bien las acciones colectivas son comunes, una sola persona también puede presentar una demanda por agravio tóxico.
Los reclamos por agravio tóxico generalmente surgen en los siguientes contextos:
Exposición ocupacional: cuando los trabajadores industriales están expuestos a toxinas, en niveles altos durante un período corto de tiempo o en niveles más bajos durante un período prolongado.
Fármacos: cuando los fármacos causan efectos secundarios no deseados.
Exposición en el hogar: cuando las personas respiran o ingieren sustancias en su hogar, como el moho tóxico.
Productos de consumo: cuando la gente usa productos, como pesticidas, que causan enfermedades no deseadas.