Por lo general, un menor de 7 años no será castigado por la ley, pero los padres pueden tener que pagar algunas consecuencias. En la mayoría de los estados de América, los delincuentes juveniles se definen a menudo como niños de entre 7 y 18 años que han cometido un acto delictivo. Entre todos los casos de delincuencia juvenil, al 70% se le ordenó libertad condicional. En Estados Unidos, los infractores por edades específicas y los castigos correspondientes son muy complicados; además, cada estado tiene sus propias reglas de delincuencia juvenil.
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